
El uso cotidiano de teléfonos inteligentes ha convertido a estos dispositivos en compañeros inseparables. Sin embargo, uno de los accidentes más comunes que pueden ocurrir es que el iphone 7 cae al agua. Este tipo de incidentes puede causar daños considerables si no se manejan adecuadamente. La combinación de la tecnología avanzada y la fragilidad de los componentes internos hace que un simple descuido pueda acabar en una situación complicada y costosa.
En este artículo, discutiremos qué hacer en caso de que tu iphone se mojado. Aquí encontrarás una series de pasos y consejos específicos que pueden ayudarte a minimizar el daño que puede provocar la exposición al agua. Al seguir estas recomendaciones, podrás aumentar las posibilidades de que tu dispositivo se mantenga en funcionamiento.
Resistencia al agua del iPhone 7

La resistencia al agua en teléfonos inteligentes ha sido una característica cada vez más común. El iPhone 7 fue uno de los dispositivos que introdujo esta mejora, con una clasificación IP67. Esto significa que puede resistir inmersiones en agua hasta 1 metro de profundidad durante un máximo de 30 minutos. Sin embargo, esta resistencia no implica que el dispositivo esté completamente a prueba de agua, y, por tanto, es crucial actuar con rapidez si tu iphone 7 cae al agua.
Este nivel de resistencia se traduce en una mayor durabilidad pero no elimina el riesgo de daño por agua. A lo largo del tiempo, factores como el desgaste, el uso de fundas no selladas correctamente o daños previos pueden comprometer la protección del dispositivo. Por lo tanto, es vital ser consciente de que aunque el iPhone 7 tiene un cierto grado de resistencia, no es infalible.
En caso de exposición al agua, cada segundo cuenta. Si tu dispositivo se moja, deben tomarse medidas inmediatas para maximizar las posibilidades de recuperación. Conociendo cómo funciona la resistencia al agua en tu dispositivo, puedes actuar con más conocimiento y menos pánico.
Pasos inmediatos tras la caída

Si tu iPhone se mojado, lo primero que necesitas hacer es mantener la calma y seguir una serie de pasos muy concretos. Prepararte con conocimientos previos te ayudará a reaccionar rápidamente y minimizar así el daño. La rapidez de la respuesta es uno de los factores más determinantes en la salvación del dispositivo.
La primera acción que debes llevar a cabo es apagar el teléfono. Esto es crucial para evitar que la electricidad fluya a través de componentes que podrían estar en contacto con el agua. Además, los circuitos dañados pueden provocar cortocircuitos, lo que, en última instancia, puede hacer que la recuperación del dispositivo sea más difícil o incluso imposible.
Después, es esencial secar el iPhone de inmediato. Al hacerlo, es importante utilizar un trapo suave y sin pelusa, ya que esto evitará que queden fibras en las entradas del teléfono. No uses secadores de pelo, ya que el aire caliente puede dañar aún más el dispositivo.
Apagar el dispositivo
Apagar el dispositivo es el primer paso primordial en el proceso de estabilización. En muchos casos, el pánico puede llevar a los usuarios a seguir utilizando el teléfono, pensando que no hay daño visible. Sin embargo, aunque tu iPhone 7 parece funcionar, la penetración del agua puede ser más profunda de lo que se percibe a simple vista. Por ende, hacerlo inmediatamente puede salvar tu dispositivo.
Para apagarlo correctamente, mantén presionado el botón de encendido hasta que aparezca la opción de «deslizar para apagar». Es vital ser paciente durante este proceso. Si notas que el iPhone 7 está demasiado mojado, considera dejarlo reposar varios minutos antes de intentar apagarlo para que los componentes internos se asienten.
Es importante destacar que en algunos casos el dispositivo puede no responder debido a la humedad en los circuitos. Si este es el caso, asegúrate de no forzar el apagado si el dispositivo no responde. Es mejor seguir los pasos de secado a continuación y esperar.
Secar el iPhone
Secar el iPhone 7 adecuadamente es crucial para la recuperación del dispositivo. Después de apagarlo, utiliza un trapo suave y seco para limpiar el exterior del teléfono. Debes prestar más atención a las zonas donde el agua tiende a acumularse, como alrededor de los botones y puertos. Asegúrate de no introducir el trapo en los puertos, ya que esto puede causar más daño.
Una vez que hayas hecho un secado superficial, lo mejor es dejar que el aire haga su trabajo. Puedes optar por tumbar el dispositivo de lado o boca abajo para evitar que el agua se acumule en el interior. Recuerda que dejar escapar el aire en lugar de utilizar calor rápido es el camino a seguir para evitar daños adicionales.
Siempre que esto sea posible, evita el uso de productos químicos o desinfectantes que puedan dejar residuos en el dispositivo. Solo asegúrate de que el exterior esté seco y no uses ningún tipo de herramienta metálica o punzante para raspar el agua que pueda haber quedado.
Retirar la tarjeta SIM
Uno de los pasos más cruciales en el proceso de secado es retirar la tarjeta SIM. Esto no solo previene que el agua llegue al interior del dispositivo, sino que también facilita el acceso al compartimento. Una vez que hayas secado el exterior del iPhone, con un destornillador adecuado retira la bandeja de la tarjeta SIM y ponla en un lugar seco.
Si en el interior de la bandeja hay agua, asegúrate de secarla cuidadosamente con un trapo. Este paso es esencial ya que puede evitar que la humedad permanezca en compartimentos donde puede causar errores en la lectura de la SIM o, en algunos casos, daños en la placa base.
Una vez que hayas sacado la tarjeta SIM, es fundamental también dejar la bandeja expuesta al aire durante el proceso de secado para evitar la acumulación de humedad dentro del compartimento.
Sacudir el dispositivo
Un paso adicional que se puede realizar para ayudar en el secado del iPhone 7 es darle una ligera sacudida. Al hacerlo, se permite que el agua se salga de las pequeñas aberturas donde podría estar escondiéndose. Es importante hacerlo con suavidad para no dañar componentes internos.
Sujeta el dispositivo en un ángulo y sacúdelo suavemente, pero ten cuidado de no forzar los componentes internos. Este es un método útil, pero no debe ser la única estrategia. Debe ser acompañado de los otros pasos ya discutidos como secado y extracción de la tarjeta SIM.
Recuerda que el objetivo es eliminar cualquier rastro de humedad que pueda haber quedado. Sea cual sea el tiempo que se tarde, es preferible ser paciente en este proceso que intentar forzar un encendido antes de conocer el estado del dispositivo.
Secar en un lugar ventilado
Después de seguir los pasos anteriores, es recomendable dejar el iphone se mojado en un lugar ventilado para que se seque de manera efectiva. Coloca el dispositivo sobre una superficie plana con buena circulación de aire. Esto permitirá que la humedad restante se evapore progresivamente.
Algunos usuarios optan por dejar su iPhone 7 en un área donde no haya exposición directa al sol, como un balcón o cerca de una ventana abierta. La luz solar directa puede causar calentamiento y provocar una expansión de los componentes internos, lo que podría provocar daños adicionales.
Además, evita utilizar un ventilador de mano o un secador de aire caliente. Estos métodos pueden hacer que el agua se mueva hacia componentes que aún no estaban afectados. Lo ideal es utilizar la naturaleza a tu favor.
Evitar fuentes de calor
Aunque pueda parecer tentador utilizar calor para acelerar el proceso de secado, no debes colocar tu iPhone 7 cerca de fuentes de calor como estufas, radiadores o secadores de cabello. Estos métodos pueden causar daños irreparables a los componentes internos del dispositivo.
El uso de calor intenso puede provocar que los plásticos y componentes internos se deformen o incluso se derritan. Por lo tanto, confiar en el secado al aire es la mejor opción. Es preferible ser paciente y dejar que el iPhone se seque de manera natural para evitar causar un daño colateral.
Asegúrate de que el área en la que has dejado tu dispositivo sea segura y esté alejados de zonas de alta temperatura o humedad. Este enfoque garantizará la conservación del dispositivo.
No cargar el dispositivo
Después de seguir todos los pasos anteriores, es fundamental recordar que no se debe cargar el iPhone durante al menos cinco horas. Esto permitirá que cualquier resto de humedad se evapore completamente antes de que la energía eléctrica fluya a través de sus circuitos. Intentar cargarlo antes de este tiempo puede generar un cortocircuito.
Ten en cuenta que la tentación de cargar el iphone se mojado es alta, sobre todo si necesitas usarlo urgentemente. Pero es esencial recordar que cualquier intento de cargarlo puede resultar en daños que pueden costar mucho más que unas horas de espera.
Utiliza este tiempo para evaluar si el dispositivo muestra signos de recuperación. Observa si enciende normalmente o si hay alguna señal que indique que el agua aún fue un problema.
Asistencia profesional
En el caso de que después de tomar todos estos pasos el dispositivo siga sin responder, es crucial buscar asistencia profesional. Un técnico especializado en Apple o en teléfonos inteligentes puede ofrecer una evaluación más exhaustiva y determinar si el daño causado por el agua es reparable o no.
Si bien algunas personas intentan abrir el dispositivo y realizar reparaciones caseras, esto puede ser riesgoso y aumentar las posibilidades de daño irreversible. Por lo tanto, es mejor dejar esto en manos de expertos que entienden cómo tratar con dispositivos dañados por agua.
Además, si tu dispositivo aún está bajo garantía, salir a la búsqueda de asistencia profesional puede significar que el costo de la reparación esté cubierto en parte o en su totalidad.
Conclusión
El accidente de que tu iPhone 7 cae al agua puede parecer catastrófico en el momento. Sin embargo, siguiendo una serie de pasos metódicos, es posible minimizar los riesgos de daño y aumentar las posibilidades de recuperación del dispositivo. Desde apagarlo y secarlo adecuadamente hasta buscar asistencia profesional si es necesario, cada uno de estos pasos es vital y puede hacer una gran diferencia.
Recuerda que aunque el iPhone tiene cierta resistencia al agua, esta no es total. Ser conscientes de ello y actuar rápidamente puede ser la clave para salvar tu dispositivo. Siempre es mejor prevenir que curar, por lo que cabe destacar la importancia de proteger tu teléfono de situaciones que puedan llevar a la exposición al agua.
Así, si alguna vez te encuentras en la desafortunada situación de que tu iphone se mojado, tendrás un conjunto de acciones a seguir que pueden ayudarte a superar este difícil momento de la mejor manera posible.